CUIDADOS CON LA PIEL

En el verano las largas jornadas bajo el sol, unidas a las largas veladas nocturnas hacen que nuestra piel sufra más de la cuenta. Buscamos un buen bronceado y llevamos menos ropa, dejando todo el protagonismo a la piel de cuerpo.

Para tener una piel saludable en verano debes prestarle atención a lo largo de todo el año. Lo ideal es mantener la piel en perfectas condiciones durante todo el año mediante peelings periódicos y una correcta hidratación, e intensificar estos cuidados unas semanas antes de la exposición solar.

Por tanto lo primero es tratar cualquier alteración de la piel que pueda empeorar con la exposición al sol como granitos, rojeces, sequedades… Una vez conseguido eso, exfolia tu piel del cuerpo profundamente para que los cuidados posteriores sean más efectivos.

Aumentar la ingesta de frutas y verduras ricas en betacarotenos son otra de las claves para lucir una piel perfecta en verano. Añade a tu dieta diaria zanahoria, pimiento, melocotón, pescado y todo tipo de legumbres, esto evitara que tu piel se deshidrate y llegue a descamarse.

Importantísimo también es saber relajarse. Y no olvidemos que en verano debemos tomar mucho liquido, agua, jugos, etc.